Hoy voy a entonar el mea culpa y a reirme de mi mismo
Hace mucho tiempo en una galaxia muy, muy lejana fui cocinero en un restaurante anexo a una piscina municipal. En verano, con la piscina abierta, ofertabamos platos combinados (Huevos con lomo, Huevos con ensalada, Huevos con salchichas, vamos, lo comun)Pues bien, un dia cualquiera vinieron a limpiar los fogones y el gracioso de turno metio un mango mal, haciendo que cuando lo ponias en "Llama de seguridad" se quedara en el minimo.
A ultima hora de la tarde estaba terminando de freir unos huevos y vino un preventas, acabe los huevos, puse el fogon en "Llama de seguridad" y sali de la cocina a hacerle el pedido mientras me tomaba una cerveza. Cuando ya estaba terminando, el hombre se volvio y me dijo;
- ¿Eso que se refleja en los azulejos no son llamas?
- ¿Como van a ser... (mierda)
Y ahi empezo lo mas parecido a un gag de Mr. Bean que os podais imaginar.
La cocina era un infierno (Observese la fina ironia) El aceite estaba ardiendo y el calor iba derritiendo ese plastiquito que tienen las cosas de acero inoxidable y que nunca se le quita a pesar de que pone "Quitar una vez colocado". Quiza por el fuego, o por una reaccion endotermica que desconozco, el mango de la sarten estaba muy caliente, asi que enrolle un monton de papel de cocina, saque la sarten del fuego y la puse en la mesa de trabajo para poder taparla, justo antes de que el papel empezara a arder y a rozarme los dedos. Con un golpe de muñeca mariquita patentado consegui no solo avivar el fuego, si no tambien que el papel se desenrollara prendiendome el mandil en su camino al suelo.
A esas alturas ya me veia ganando el premio Darwin a la muerte mas estupida del año. Tire el papel al suelo e intente quitarme el mandil (mierda de doble nudo) y apagarlo dandole golpes contra la freidora (Si, contra la freidora ¿Que pasa?) Consegui apagarlo y mire el papel que, por pena supongo, se habia apagado solo.
Y alli estaba yo, en medio de una humareda, lleno de tizne y hastiado de la existencia. Asi que me sente, me quite migorro y me encendi un cigarrito solo un segundo antes de que sonara la alarma de incendios de una piscina llena de gente pero eso, querido lector, es otra anecdota
No hay comentarios:
Publicar un comentario