El reflejo de la muerte.
Mi vida había cambiado mucho estas últimas semanas a raíz de la muerte de James. Es cierto que últimamente nos habíamos distanciado por culpa de unos problemas menores, pero seguíamos manteniendo ese vinculo tan especial que compartíamos desde siempre. A raíz de su suicidio sentía que me faltaba algo en mi interior, como si se hubiera llevado parte de mi alma con él. Todo empezó un par de noches después del entierro, no podía conciliar el sueño y me levante a beber un poco de agua y estirar las piernas. Cuando volvía por el pasillo hacia la habitación vi su cara de reojo mirándome desde el espejo que decoraba la entrada. Me quede inmóvil en la oscuridad, incapaz de volver mi cabeza para volver a mirar. Seguramente estaba medio dormido y la tensión acumulada había hecho el resto, pensé, no hay por qué alarmarse. Y sin embargo sentía su mirada clavada en mi espalda hasta tal punto que el vello se me erizo. Camine hasta mi cama despacio sin volver la vista atrás y me acosté. Ese fue el momento en que mi vida se convirtió en un infierno.
Tuve que dejar de salir a la calle puesto que en cada escaparate o cristal se reflejaban sus ojos, vacios y amenazantes. También tape con sabanas todos los espejos del apartamento y cerré las persianas para evitar los reflejos. Era un consuelo relativo ya que estaba seguro de que James seguía allí. ¿Tanto daño le había hecho como para que volviera de la tumba para castigarme? ¿Tanto se habían torcido las cosas entre nosotros para merecer este castigo?
Los días se convirtieron en semanas y yo continuaba en mi encierro, empecé a tomar unas pastillas para dormir y otras para mantenerme despierto dependiendo de mi estado de ánimo. Para ser sincero tenía la sensación de que nunca saldría de allí, a menos que encontrara el valor suficiente para enfrentarme él.
Y un día sucedió, no podía seguir así, camine con determinación hacia el espejo del cuarto de baño y lo descubrí. Allí estaba James, de pie, esperándome en silencio, su aspecto se había vuelto mucho más aterrador que al principio. Sus ojos, abiertos de par en par miraban fijamente a los míos mientras un sudor frio recorría mi frente. Un destello me hizo fijarme en su mano, llevaba un cuchillo. Lo levanto para señalarme mientras tornaba levemente la cabeza. No sabía cómo reaccionar, durante un leve instante oscilo la hoja hasta que vertiginosamente se lo hundió en el pecho. Mi vista se nublo y sentí algo húmedo recorrer mi estomago hacia el suelo. Justo antes de perder la consciencia lo comprendí, James no estaba enfadado conmigo, solo quería que me uniera a él en el otro lado, reforzar nuevamente nuestro vinculo. Sonreí y caí mientras todo se tornaba en oscuridad. Muy pronto estaríamos de nuevo juntos.
Esta escuchando la RRKU en el 103.6 de su dial, antes de seguir compartiendo buena música una noticia de última hora. Un vecino de la ciudad, Bob Peterson fue encontrado muerto en su casa después de que varios conocidos suyos informaran a la policía que llevaban varias semanas sin tener noticias suyas. Un hecho muy duro para su familia, puesto que su hermano gemelo, James Peterson, se suicido también hace poco mas de un mes…
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